Magia Delay, 2021.
Wood installation, Column, and two-years paintings. / Instalación, Columna y pinturas de dos años.
5500 x 250 x 250 cm. 
Teatro San Martín. BIENAL SUR. Buenos Aires [ARG]
NOV 2021
Photo: Gonzalo Maggi

Decidí construir una columna que actúe como un imán para mi producción pictórica. Cualquier persona podría tomar piezas de mi trabajo y llevárselas. Para mí, abandonar esas pinturas en el ámbito público es un gesto de ruptura y reconversión de la imagen y de los prejuicios individuales que trae. Todas estas pinturas, de alguna manera u otra, pertenecen a un mundo que está muriendo, uno que pondera el éxito del presente a expensas del futuro, y uno en donde la misoginia y el racismo se celebran en la calle. Renunciar a ellas, es también una renuncia simbólica a la manera de pensar las imágenes que tenemos lxs artistas contemporáneos, hasta ahora. Yo estaría feliz con la transformación de la pieza. El deterioro de las pinturas por el tiempo, el clima o la posibilidad de que sean robadas por las personas. La estructura entonces luciría más dañada y quemada, como cenizas. Imaginar eso me produce un sentimiento de fragilidad, porque se hubiese producido un trauma en ese monumento. 

Creo que los monumentos son para atraer a las personas, creando una falsa sensación de familiaridad, atrayendo y empujando la intimidad, con cierta demora. Esta torre con pinturas como cáscaras terminaría transformada en una pieza artística por la palabra de las personas, como si fuera un encantamiento o la magia, capaz de actuar sobre la realidad a través de los signos.


 

 

Hundreds of paintings are placed on a column and abandoned at the mercy of the audience, with the implicit permission to take them away. Then, the structure is refilled. Renouncing these paintings is a symbolic refusal of my prejudices.

I decided to build a column that acts as a magnet for my pictorial production. Anyone could take pieces of my work and take them away. To abandon these paintings in the street is a gesture of rupture and reconversion of the image and of the individual prejudices that it brings. All of these paintings belong to a world that is dying, one that weighs the success of the present at the expense of the future, one where misogyny and racism are celebrated. Renouncing them is also a symbolic renunciation of the way of thinking about the images that we contemporary artists have, until now. I would be happy with the transformation of the piece. The deterioration of the paintings due to time, weather or the possibility of them being stolen by people. The structure would then look damaged and burned, like ashes. I can perceive a feeling of fragility, because there would have been a trauma in that monument.

The monuments are prone to attract people, creating a false sense of familiarity, attracting and pushing intimacy, with some delay. This tower with paintings like shells would end up transformed into an artistic piece by the word of people, as if it were an enchantment or magic, capable of acting on reality through signs.